Si quieres visitar Salamanca, pero no tienes mucho tiempo, te contamos a continuación qué ver en Salamanca en un día con una ruta a seguir para sacar el máximo partido a tus 24 horas.
Salamanca es una ciudad rica en historia, cultura y arte. Ciudad cuna de la Universidad más antigua de España y de las más antiguas de Europa, que ha sido hogar para grandes personajes de la historia de España: desde Miguel de Cervantes a Francisco de Vitoria, de Beatriz Galindo a Carmen Martín Gaite. Una ciudad que, paso a paso, te hará imaginar que vuelves a la época medieval. Una ciudad en la que pasear sin prisa y perderse por las calles menos concurridas.
El centro histórico de Salamanca puede visitarse fácilmente incluso con poco tiempo, ya que los monumentos están cerca unos de otros y se puede llegar cómodamente a pie. A continuación, os propongo un itinerario de un día que toca los puntos principales de la ciudad.
Qué ver en Salamanca en un día: la mejor ruta
1. Plaza Mayor de Salamanca
La primera etapa de nuestra visita para descubrir Salamanca en un día no puede ser otra que la Plaza Mayor. Punto neurálgico de la ciudad, la plaza es el corazón y el punto de encuentro para visitantes, turistas y estudiantes.
Los medallones que decoran los 4 lados son una de las características más destacadas del lugar. En ellos se representan personas que vivieron en Salamanca, con repercusión en la historia de España. Reyes como la reina Isabel la Católica, exploradores, como Hernán Cortés o Cristóbal Colón y escritores como Miguel de Unamuno, o Antonio de Nebrija decoran nuestra Plaza Mayor.
2. Iglesia de la Purísima y Palacio de Monterrey
La iglesia de la Purísima es una de mis favoritas. Una joya italiana en la meseta castellana. Dentro de la iglesia toda la decoración se trajo desde Italia: mármoles de carrara, Prato, Venecia, cuadros pintados por Cosimo Fanzago, Guido Reni y Giovanni Lanfranco entre otros. Aunque el más famoso de los cuadros es la “Inmaculada Concepción”, de José de Ribera.
Por su parte, el Palacio de Monterrey, en la misma plaza que la mencionada iglesia, perteneció a los condes de Monterrey, hasta que pasó a la familia de Alba por uniones matrimoniales. Son los Alba los propietarios actuales y a ellos se debe la reestructuración del palacio en el interior, así como las obras de arte que atesora.
3. Casa de las Conchas
Imposible saltarse esta parada a la hora de pensar qué ver en Salamanca en un día. La Casa de las Conchas es el palacio más famoso de Salamanca. Su decoración exterior de conchas hace las delicias de todos los que nos visitan. Se terminó de construir cuando Rodrigo Maldonado se acababa de casar con Juana Pimentel. De hecho, según una teoría, la decoración de conchas se debe al amor de Rodrigo por su mujer, quien quiso utilizar uno de los símbolos del escudo de Juana (la concha) para llenar la fachada. Ahora el palacio es la Biblioteca Pública.
4. Edificio Histórico Universidad de Salamanca
En la calle Libreros se encuentra el campus medieval de la Universidad de Salamanca.
El edificio histórico, con su famosa fachada plateresca, no deja a nadie indiferente. Entre toda la decoración hay una rana escondida.
Según la leyenda, si podéis encontrar la rana sin ayuda, os traerá suerte. Sin embargo, como decía Miguel de Unamuno, “No es lo malo que vean la rana, sino que no vean más que la rana”. Visitando el interior conocerás el claustro, el aula de Fray Luis de León intacta, la biblioteca, y mucho más. Puedes consultar horarios y precios actualizados en su página web.
El Patio de Escuelas Menores estaba destinado a ser instituto, lugar de formación para acceder a la universidad. En él descubriréis el Cielo de Salamanca, un fresco del S. XV. Representa las constelaciones y se utilizaba para enseñar astrología, además de decorar la biblioteca antigua.
5. Catedrales de Salamanca
La ciudad de Salamanca cuenta con dos Catedrales, una vieja y una nueva. La Catedral Vieja data del s. XIII y la Nueva del s. XVI. Los templos comparten un muro y la torre más alta. La Fachada del Domingo de Ramos tiene entre la decoración un astronauta, detalle que dejó el restaurador de la fachada en el s. XX. Del interior destaca el Cristo de las Batallas, del Cid, y el retablo y capillas de la Catedral Vieja.
En su página web hay mucha información sobre los templos, se pueden reservar entradas y consultar exposiciones temporales.
Si queréis ver Salamanca desde lo alto, elegid la exposición Ieronimus. En el recorrido, subiréis a la torre y pasearéis por miradores y balaustradas tanto por dentro como por fuera de las dos catedrales.
6. Puente Romano
Construido en el siglo I, ha sido durante siglos el punto de entrada a la ciudad. “Salmantica”, la antigua ciudad romana, era una “mansio”, un punto de descanso en la Vía de la Plata. Por desgracia, no nos han llegado otras infraestructuras romanas hasta nuestros días. Junto al puente veréis el verraco, la estatua más antigua que conserva Salamanca.
Este toro (aunque ahora está sin cabeza) era un tótem para los primeros habitantes de la ciudad, pueblos anteriores a vetones y vacceos, y que tenían sus casas en el Cerro de San Vicente. Este toro es muy famoso gracias al Lazarillo de Tormes, y su episodio con el “toro de piedra”.
7. Patio Chico y Casa Lis
La Casa Lis es uno de los museos más visitados, así que nos tenemos que detener en el cuando pensamos qué ver en Salamanca en un día. Es un palacete modernista, cuyo interior alberga una exposición de Art Déco, convirtiéndolo en Museo de Art Nouveau y Art Déco. Su colección de criselefantinas y muñecas de porcelana es única.
En el mismo entorno del museo, encontraréis el Patio Chico, el rincón con más encanto de Salamanca. En esta plaza podemos observar el estilo románico y gótico juntos, ya que se observan las dos Catedrales por detrás. En verano se organizan conciertos y teatro, teniendo como escenario las dos catedrales.
8. Huerto de Calixto y Melibea
Es difícil imaginar un lugar más romántico e idílico que este jardín sobre la muralla medieval. Fernando de Rojas, escritor de “La Celestina”, se inspiró en este enclave y lo utilizó como escenario para su libro. Ahora es un jardín botánico, con más de 100 especies de flores, arbustos y árboles. Sus rincones, bancos y naturaleza lo hacen idóneo para una pausa en vuestra visita.
9. Convento de San Esteban
El Convento de San Esteban es uno de los monumentos más importantes de Salamanca. Su iglesia es tan larga como la Plaza Mayor, 80 metros, haciendo de ella la iglesia conventual más grande de Europa.
Junto a ella, el espacio destinado a los monjes. Desde el siglo XV siempre ha sido ocupado. Por sus claustros han pasado Santa Teresa de Jesús, Miguel de Unamuno, Francisco de Vitoria, y… ¡hasta Cristóbal Colón!
Ahora ya sabes qué ver en Salamanca en un día. Con una sola jornada es suficiente para enamorarse perdidamente de la ciudad y dejar la miel en los labios para volver una segunda, o una tercera vez a Salamanca. Ya lo decía Miguel de Cervantes, “Salamanca, que enhechiza la voluntad de volver a ella a todos los que de la apacibilidad de su vivienda han gustado”.
Consejos prácticos para organizar la visita
Llegar a Salamanca
Si llegáis en coche, podéis aparcar en alguno de los parkings del centro o dejar el coche en el entorno de la estación de autobuses o del parque de los Jesuitas y caminar al centro. Todo el centro histórico es peatonal y no se permite el acceso al tráfico. Si optáis por el autobús, la estación está a unos 10/15 minutos de la Plaza Mayor andando. Los trenes, por su parte, no son abundantes en Salamanca. Si llegáis en tren, bajad en el apeadero “La Alamedilla” siempre que sea posible, ya que está más cerca del casco histórico y os facilitará la logística para completar cada punto de nuestra guía de qué ver en Salamanca en un día.
Monumentos que visitar por dentro
Los tres monumentos más importantes para visitar su interior son las Catedrales, el Edificio Histórico de la Universidad, y el Convento de San Esteban.
Dónde comer
En Salamanca, ¡la gastronomía es otro monumento! Hay restaurantes, bares y mesones para todos los bolsillos. La Calle Libreros es una zona en la que encontraréis muchos restaurantes con menú del día y las calles paralelas a la Plaza Mayor tienen muchos bares para tapear.
El jamón de Guijuelo, los huevos con farinato, las patatas meneás con tocino, la carne de morucha o la chanfaina son algunos de los manjares que podréis degustar en la ciudad.
Visitas guiadas
Ahora ya sabes qué ver en Salamanca en un día y si queréis conocer lo más importante en poco tiempo o entrar a alguno de los monumentos con un guía que os explique lo principal, podéis reservar nuestras visitas “Maravillas de Salamanca” en grupo los miércoles y domingos, o bien puedes reservar la misma visita, “Maravillas de Salamanca” en Tour Privado y disfrutar de una experiencia a tu medida con guías locales expertos en el patrimonio de la ciudad. ¡No te arrepentirás!